Como ya se ha mencionado en un par de ocasiones en este blog, la industria automotriz coreana está en franco desarrollo, con diseños frescos, buenos rendimientos de consumo y una calidad impresionantemente mejorada respecto a sus productos anteriores.
CARMAX, representante en Bolivia de la marca Hyundai, ha puesto en su show-room de Calacoto el nuevo Sonata 2011, totalmente rediseñado, como parte de una agresiva campaña que trata de aprovechar el vacío que han dejado los importadores de autos usados para posicionarse como una marca no-frills, antes que nada, perfecta para el mercado latinoamericano.
Cuando digo completamente rediseñado, hablo en serio: el nuevo Sonata guarda poca semejanza con su antecesor, salvo el hecho de ser un sedán mediano. Lo primero que salta a la vista es que el Sonata deja de intentar parecerse a los autos medianos de otras marcas de mucho más prestigio. De hecho, no se parece a nada que exista actualmente en el mercado (excepto claro su gemelo pródigo, el Kia). O tal vez sólo un poquito al Infiniti. Su líneas son gráciles, livianas y deportivas, entrando por completo a la nueva ola en la que se parte de una fascia amplia y agresiva, se sigue con un capó abultado dando la imagen (o la ilusión en este caso) de esconder un potente motor, y afinándose en forma de gota al ir hacia atrás, todo asentado sobre grandes ruedas de aro 18’. Aunque el novedoso diseño tuvo que sacrificar un poco el espacio hacia el techo en el asiento trasero, por lo que no recomiendo a personas muy altas viajar atrás, peor considerando que el espacio para las piernas en la banca trasera ha bajado de 374 a 346 mm, es decir, casi tres centímetros menos.
A pesar de esta posible incomodidad para personas altas, el interior ofrece muchas amenidades y suficiente comodidad en todos los demás casos. Dado que es un sedán familiar, la banca trasera está pensada para acomodar a los niños: dos anclajes Isofix para asientos de bebé, tres cinturones de tres puntos, el asiento central puede ser convertido en un apoyabrazos con posavasos… En fin, lo necesario para poder convivir con niños.
Inspeccionando el tablero encontramos algunos datos interesantes. El Sonata tiene muchos de los chiches necesarios en un auto familiar como éste, tales como control crucero, mandos al volante, radio con mp3… Sin embargo, y esto seguramente explica su bajo precio, prescinde de algunas otras amenidades con las que cuenta su competencia. El aire acondicionado no es automático, ni tiene ningún dispositivo de medición de la temperatura interior o exterior, no cuenta con sensores para asistencia al parqueo – muy pocos autos en Latinoamérica lo tienen a pesar de ya ser un estándar en el hemisferio norte -, el volante, con un lindo acabado en cuero, no se ajusta telescópicamente, y quizás lo más decepcionante es que la tela de los asientos se ve algo barata, lo cual no ayuda al hecho de que el tablero también está cubierto de un plástico duro y poco agraciado. Acá es donde se acumula la lista de carencias. ¿Distribución electrónica de frenado? No hay. ¿Control de estabilidad? No tiene. ¿Asientos de cuero? Niet. ¿XM, navegación satelital, asistencia remota? Nicaraguas.
No obstante, y hay que mantener en mente que este es un coche de menos de 25 mil dólares, el diseño interior es atractivo, moderno, con varios tonos y acabados que lo hacen ameno y envolvente. A estas alturas, no entiendo cómo hemos copado con los aburridísimos tableros negros por tantos años.
Mirar bajo el capó puede resultar decepcionante luego de haber visto el diseño exterior agresivo y vanguardista. En efecto, el gran compartimento esconde un motor de cuatro cilindros en línea y 2,4 litros de desplazamiento. Más que suficiente, sin duda, pero nada excitante dado el segmento al que apunta. Ahora bien, no se me ocurre quién intentaría llevar un sedán familiar coreano a los piques de cuarto de milla.
No se engañe, sin embargo, el lector. Si bien no ganará ningún cuarto de milla, los 200 caballos de fuerza (25 más que su antecesor) que produce son muy respetables, considerando que el peso neto del Sonata es de a penas 1451 kilos (58 menos que su antecesor), por lo que su relación peso/potencia es de 7,2 kilos por caballo, muy aceptable.
De cualquier manera, si insiste el lector en romper la barrera del sonido en un sedán familiar, Hyundai ofrece como opción equipar sus variantes SE y Premium con un motor de 2,0 litros turbo, que produce simpatiquísimos 274 caballos de fuerza, reduciendo la relación peso/potencia a 5,6 (el turbo pesa 90 kilos más con el techo solar), bastante cercano a un roadster.
En su motorización normal, el Sonata recorre 9,3 kilómetros por litro en ciudad y fantásticos 14,8 kpl en carretera. Póngale el motor turboalimentado, y estos números a penas se reducen unas décimas.
El turbo también ofrece mayor equipamiento (he ahí por ejemplo al a/c automático que extrañábamos), que sumado a las ventajas que tiene en la altura de La Paz inducir el aire dentro del motor bien podría justificar el gasto de los $US 2.000 extras que cuesta.
Ambos motores se acoplan a una caja de velocidades automática o semiautomática de seis velocidades. En el 2.0T Premium, la transmisión semiautomática se equipa con manetas de cambio al volante, para ponerse a tono con la moda iniciada por Ferrari ya hace más de diez años y que cada vez cobra más fuerza.
El Sonata se siente en el manejo muy suave y dócil, especialmente para un 4 en línea, con muy poca vibración y una buena sensación de lo que pasa afuera. Ayuda a esta sensación correcta la dirección un poco dura, como personalmente lo prefiero, pues se tiene así una mucho mejor comunicación con lo que pasa en el tren delantero. Te llevará con seguridad, aplomo, potencia decente y mucho estilo a donde quieras ir, siempre que el camino esté asfaltado. El auto se conduce muy bien, en realidad, pero su problema es que no es un auto emocionante. Siempre predecible. Siempre progresivo en sus reacciones. Manejar el Sonata es como conversar con un caballero inglés. Lo cual lo hace muy atractivo para quien tiene un carácter controlado y es razonable y maduro, y contraindicado para quienes nos guía la pasión y tenemos gasolina en las venas.
Tan tranquilo, maduro y razonable es este auto que su precio es hasta 10% más bajo que los de su directa competencia. Por tanto, su objetivo corporativo de ser la marca no-frills por excelencia se cumple a cabalidad. Y ese es, creo, más allá de su particular estilo, su eficiencia o su aplomo, el factor que lo pone en franca ventaja frente a sus rivales japoneses.
Esteban
Hyundai Sonata 2011
Tipo: Sedán mediano Segmento: C
Motor delantero I4 de 2,4 litros ó I4 de 2,0 litros turboalimentado, 6 velocidades (at o secuencial), tracción delantera
200 hp (2,4) ó 274 hp (2,0T) 184 lb/ft (2,4) ó 269 lb/ft (2,0T)
Relacionado: Kia Optima 2011
Competencia: Nissan Altima; Honda Accord; Subaru Legacy
Precio base: $19.195,00 Precio tope de gama: $27.045,00 Est. Bolivia: $25.000,00 a $34.000,00