Bueno, bonito y barato: Hyundai Elantra 2012

El totalmente nuevo Elantra – el último de la alineación de vehículos particulares de Hyundai que faltaba rediseñar en el estilo Fluidic Sculpture de Cedric André – se ha vendido como pan caliente, según la empresa CARMAX, representante en Bolivia de la marca. Y es fácil entender el porqué, cuando luego de sentarse en sus asientos de cuero, revolucionar el pequeño pero efectivo motor de 1,8 litros, activar su aire acondicionado y girar su grueso volante forrado en cuero y con control de crucero, entre otras bondades, el asesor comercial le da el precio de este compacto coreano: 26.500 dólares, con oferta especial de 1.500 dólares menos por el mes del padre, dejando el neto en $US 25.000, al menos cinco mil dólares menos que cualquiera de sus competidores en ese nivel de equipamiento.

Bueno

El nuevo Elantra se equipa con un efectivo y eficiente motor de 1,8 litros y 148 caballos de fuerza a 6.500 revoluciones por minuto y 176 N·m de torque disponibles desde las 4.700 rpm, equipado con doble árbol de levas a la cabeza y sistema de apertura variable de válvulas CVVT-i. Gracias a esta combinación, las cifras de consumo son impresionantes. CARMAX declara una economía de combustible en ciclo combinado de entre 14 y 18 kilómetros por litro, ubicándose entre los autos más económicos del segmento y ciertamente siendo al más económico en nuestro mercado.

Sus cifras oficiales de rendimiento quizás no son tan impresionantes como las de consumo, pero son respetables. Con una aceleración de cero a 100 kilómetros por hora en 8 segundos clavados, y recorriendo el cuarto de milla en 16,3 segundos, cruzando la meta a 140 kph, el Elantra es levemente más lento que sus competidores más directos, el Ford Focus y el Honda Civic, pero por cifras que solo importan al momento de pavonearse.

El manejo del nuevo Elantra es suficientemente suave para un viaje en la ciudad o sobre caminos asfaltados, y más que suficientemente deportivo para hacer de una excursión divertida por caminos sinuosos, pero ciertamente no es ningún M3. Uno de los aspectos negativos es la mala calidad de los neumáticos con los que se equipa de paquete, que producen un ruido molesto y disminuyen claramente la calidad de manejo. Algunos dueños de Elantra hicieron una inversión adicional para comprar neumáticos de buena marca para resolver el problema. No obstante, en mi opinión, esto no basta. El motor de cuatro cilindros se esfuerza bastante para llegar a todo su potencial, y eso se siente en la cabina. Felizmente, el nuevo compacto viene con un buen equipo de sonido para disimular la cabina ruidosa.

Bonito

No hay duda que los diseños de la última generación de Hyundai son muy atractivos, y el del Elantra no es la excepción. Particularmente me gusta mucho la línea del hombro y cómo se proyecta hacia arriba en el pilar D. Si bien las llantas se ven algo chicas en relación con el cuerpo del compacto (lo contrario nos acercará más al Sonata), la presencia de los frenos de disco en las cuatro ruedas y los aros de 16” le dan un toque de lujo al que acompañan muy bien los neblineros integrados a la defensa delantera o el spoiler dibujado en la chapa del maletero.

Por dentro el esfuerzo es aún mayor. Los asientos de cuero son cómodos y el espacio para las piernas es generoso adelante y suficiente atrás, aunque el material de los asientos no es exactamente la mejor artesanía en piel que haya experimentado. De manera sorprendente, la tapa del tablero está hecha de plástico suave y acolchado, y no de plástico duro como se estila en esta categoría, lo que le da un valor agregado adicional muy atractivo. El faux metal de la consola central condice con las tendencias actuales en interiores para vehículos económicos y está bien ejecutado, no se ve barato ni frágil, y la disposición de los instrumentos de infoentretenimiento y de aire acondicionado es moderna y se integra bien al diseño total. La instrumentación es atractiva y la computadora de a bordo ya resulta hoy en día imprescindible, el volante forrado en cuero se siente grueso y cómodo, y la palanca de cambios está bien presentada. No obstante la misma forma de cuña del diseño exterior provoca sacrificios para la visibilidad del conductor, entrometiéndose el pilar A izquierdo más de lo necesario.

Barato

No hay duda que el mayor mérito del nuevo Elantra es la relación calidad-precio. Si bien es cierto que no es el dechado del lujo o de la deportividad, lo que se obtiene por 25 mil dólares es mucho – asientos de cuero, un tablero bien equipado y bien acabado, aire acondicionado, frenos de disco con ABS en las cuatro ruedas, aros de aleación de 16”, neblineros, tapa del maletero con mando a distancia, computadora de a bordo… Pero la economía no se acaba ahí, pues el consumo es muy moderado, entre lo mejor de su categoría, y los repuestos son bastante baratos, y CARMAX da una garantía de fábrica de 100.000 km o 3 años que incluye el primer mantenimiento gratuito.

Y a pesar del excelente precio y los beneficios, el Elantra no se siente barato. A diferencia de la competencia china, mucho más barata en el precio de compra, el Elantra se siente sólido, refinado y bien construído. No se notan líneas de soldadura ni siquiera en los bordillos de las puertas. Lo que pudiera explicar el bajo precio quizás sea la falta de un aislamiento acústico digno del nombre, que es la principal molestia que el conducir un Elantra podría provocar. Pero me parece un pequeñísimo sacrificio considerando el conjunto, pero sobre todo considerando cómo se han disparado en los últimos tres años los precios de los automóviles.

Esteban