A pesar de las críticas por ser más aburrido que un
refrigerador, el Toyota Corolla sigue vendiéndose en volúmenes extraordinarios,
consistentemente logrando el primer lugar o uno de los primeros lugares en
ventas anuales en el mundo y demoliendo año tras año su propio récord mundial
como el auto más vendido de la historia (recordemos que el récord del VW sedán
fue vapuleado por Toyota ya el año 1992 y el 2012 la cifra se ha duplicado). Y
eso que la generación vigente es difícilmente distinguible de la anterior,
aparentemente brindando solamente lo estrictamente necesario para satisfacer a
los compradores. El Corolla tal vez no arranque suspiros, ¡pero cómo abre
billeteras!
Con el nuevo Corolla 2014 que recientemente debutó en Los
Ángeles, ¿podrá Toyota silenciar a la crítica y seguir con sus altas ventas?
Incluso Toyota Motors admite que el Corolla no tiene la mejor reputación en
cuanto a diseño, al declarar que esta nueva generación “desafía los
preconceptos” acerca del Corolla. Quizás sea una exageración, pero es cierto
que el nuevo modelo extrae bastante del concepto Furia, con líneas más afiladas
y fluidas y con detalles más llamativos. Toyota llama a este nuevo look “Dinamismo
Icónico”, y el lenguaje de diseño parece
bien orientado hacia lograrlo. Algunas
mejora incluyen una distancia entre ejes 10 cm más larga, con el largo total
creciendo más o menos de igual manera. El ancho crece en 16 mm y el alto en 10
mm. Como el concepto Furia, el Corolla 2014 tiene voladizos cortos y un perfil
más cónico, rematado con un pilar C que fluye hasta dentro del maletero. Esta
forma reduce el coeficiente de arrastre del Corolla a bajísimos 0,28, logrados también
por una plancha difusora colocada bajo el paragolpes delantero que ayuda a
distribuir mejor el flujo de aire y mejora la eficiencia en el consumo.
Otras mejoras incluyen una fascia delantera más esbelta, una
cenefa trapezoidal parecida al del Avalon, y faros delanteros que dan al auto
la apariencia de esta entrecerrando los ojos. Como no podía faltar en esta
locura mundial por las luces LED, el Corolla incluye una buena cantidad de
estos foquitos. Estas luces suelen reservarse para los modelos más de tope de
gama, pero el Corolla los ofrece de paquete en toda su alineación, tal vez por
influencia de la industria china. En la cola, las cosas también se parecen
mucho al concepto Furia, con amplios conjuntos de luces con puntas apuntadas
hacia el centro del maletero, y un pequeño spoiler trasero opcional.
El motor de bloque de aluminio de 1,8 litros y con
distribución variable inteligente (VVT-i) del anterior modelo sigue presente,
excepto en la variante LE Eco que cambia el VVT-i por el nuevo sistema de
distribución Valvematic, que amplía la gama de variabilidad de la admisión,
permitiendo según Toyota un 5% de mejora tanto en el ahorro de combustible como
en la potencia del motor, logrando así 140 caballos de fuerza, muy respetables
para este segmento, y 170 Nm de torsión, frente a los 132 HP de las variantes
L, LE y S. La variante LE Eco está claramente apuntada hacia competidores
igualmente hipereficientes como el Ford Focus SFE y el Chevrolet Cruze Eco, con
rendimientos de entre 17 y 19 kilómetros por litro. El modelo de base L se
ofrecerá con transmisión manual de 6 velocidades o automática de cuatro,
mientras que el resto de la gama vendrá de paquete con una transmisión CVT que
funciona por poleas, denominada CVTi-S (“i” de inteligente, “S” de shift o cambio), que Toyota dice
eliminará la desagradable sensación de banda elástica que plaga a los CVT
normales. Ver para creer.
El sistema Star de seguridad integral es equipamiento estándar,
e incluye frenos ABS, distribución electrónica de frenado, asistencia al
frenado, control de estabilidad y ocho bolsas de aire, además de monitor de
presión en los neumáticos. Las versiones L y LE Eco traen de serie aros de
acero de 15’’, mientras que el LE y el S usan aros de acero de 16’’. Las
llantas de aleación de 16’’ son opcionales para el LE, el S y el LE Eco, y el S
puede pedirse con aros de 17’’ de aleación con neumáticos de perfil 215/45.
Al interior, el tablero está diseñado para dar una sensación
de mayor gama con sus acabados de negro brillante y metálico. El conjunto de
instrumentos viene en dos diseños, uno tradicional con tres relojes para el L,
LE y LE Eco, o uno de dos relojes y computador central para el S. El interior
es más amplio gracias a la mayor distancia entre ejes, agregando espacio para
las rodillas en el asiento trasero. Más notablemente, un rediseño de la tubería
del escape ha permitido un suelo más plano, eliminando la molesta joroba central
que caracterizaba a los anteriores modelos. Los asientos están mejor acolchados
y son más envolventes, y se forran con tela o un material sintético denominado SofTex
(no hay cuero, lo siento). También se ha mejorado la insonorización, se ha
insertado la antena del radio a la luneta trasera, y se incluyen como estándar
vidrios y puertas eléctricos, aire acondicionado con filtro y Bluetooth,
mientras que la entrada keyless con botón de encendido, climatizador
automático, timón forrado en cuero, pantalla de infoentretenimiento y comando
de voz son todas opcionales.
Con estos niveles de equipamiento, el Corolla parece bien
encaminado a mantener su competitividad, a pesar de ya no estar en la base de
la flota Toyota, pues ya hay tres modelos de entrada al mercado por debajo de
él (Aygo, Vitz y Yaris). No obstante, los precios se mantienen razonables,
arrancando en unos $24.500 para el modelo más básico y llegando hasta los $32.000
(estimaciones de EOC en función a los precios publicados para Estados Unidos).
Sin embargo, aunque parece que mantendrá su capacidad para dominar el mercado
por su simplicidad, no veo si quiera un intento de correr riesgos de parte de
Toyota. Hasta ahora apostar a lo seguro ha funcionado, y no hay razón para
cambiar de estrategia, con lo cual la dosis de aburrimiento se mantiene casi
intacta. Por suerte para Toyota, aparentemente los entusiastas de la osadía
creativa somos minoría.
Esteban
No hay comentarios.:
Publicar un comentario